Sidel planifica invertir en Parma aproximadamente 5 millones de euros para la transición energética, acompañando la realización de la instalación fotovoltaica con otras importantes iniciativas orientadas a contribuir al logro de los objetivos de sostenibilidad que la empresa -líder mundial en el suministro de soluciones para el envasado de bebidas, alimentos y productos para la higiene personal y del hogar en PET, lata, vidrio y otros materiales- se ha impuesto para el trienio 2022-2024.
“Nuestro compromiso ambiental está en el centro de todas nuestras actividades. En efecto, contribuimos a la protección del ambiente innovando y desarrollando soluciones sostenibles para reducir las emisiones de CO2”, comentó Francesca Bellucci, Sustainability Director, Sidel Group. “Nuestra estrategia de descarbonización apunta a una reducción del 50% de las emisiones Scope 1 y 2, es decir, aquellas derivadas de nuestras operaciones y del consumo de energía, para el año 2030. Este objetivo ya ha sido alcanzado: en 2023 redujimos nuestras emisiones en un 75% respecto de 2019. La puesta en funcionamiento a pleno régimen de la instalación fotovoltaica de Parma nos permite dar otro importante paso hacia el objetivo de 2050 de cero emisiones netas en toda nuestra cadena de valor.”
Todas las plantas de producción de Sidel en el mundo, incluida la planta de Parma, están certificadas según el sistema de gestión ambiental ISO 14001. Gracias a esta certificación, Sidel ha adoptado un sistema que le permite reducir continuamente su huella ambiental a nivel mundial. Integrando los principios de sostenibilidad en sus operaciones, la empresa apunta no sólo a reducir su huella de carbono sino también a mejorar la eficiencia operativa, la innovación y la competitividad de la empresa.
“Estamos particularmente orgullosos de haber puesto en funcionamiento la instalación en su totalidad para suministrar a la planta energía limpia autoproducida”, comentó Riccardo Rosselli, VP Global Sites & Facility Management de Sidel Group y Site Leader de la planta de Parma. “Se trata de un paso muy importante hacia el logro de nuestros objetivos de sostenibilidad ambiental para la sede y la planta, en línea incluso con los objetivos de sostenibilidad que la ciudad de Parma se ha impuesto para 2030. Deseo agradecer a todos los colaboradores de Sidel que a lo largo del último año se esforzaron por hacer realidad este ambicioso proyecto”.